El pasado viernes cené con un tipo que ha desayunado con Zeldman ¡wow! :)
En efecto, poco más de media docena de individuos/as nos dimos cita en el V Coctel que se celebraba en Las Palmas de GC (del que José Ramón ya
ha hablado en su blog). Entre los temas varios que salieron en la conversación estuvo una vez más el de los clientes, que, por mucho que digan, rara vez tienen la razón. En esta ocasión estuvieron presentes tres personas de la
ULPGC, y la verdad es que no les envidio: si ya cuesta convencer a un cliente de que lo usable y accesible es lo mejor para su proyecto, imagínense cuando "el cliente" es un conglomerado de más de veinte reinos de taifas, en cada uno de los cuales ya han desarrollado sus webs corporativas como dios les dió a entender, sin ningún tipo de criterio común... y mucho menos, con una interface o siquiera una distribución de contenidos similar... Lo dicho, no les envidio y les deseo la mejor de las suertes. Creo que lo tienen más sencillo incluso los encargados del rediseño de la/las web/s del
Gobierno de Canarias. Al menos ellos tienen una jerarquía (burocráticamente hablando) bien establecida. Pero vamos, que tampoco les envidio.... ;)
Interesante el apunte de José Ramón sobre como la pérdida completa de la antigua estructura de gobcan.es sin duda ha supuesto un tremendo despiste para los usuarios habituales de la página.
De los otros temas "técnicos" que se hablaron, me quedo con un concepto bastante interesante: la "actuabilizabilidad" de una aplicación. Es decir, la facilidad de actualización de una herramienta/aplicación determinada. Algo parecido a la escalabilidad, pero más concretito... Es decir, "¿puedo cambiar de versión de este programa sin perder dos semanas y la mitad de mis contenidos en ello?", o "¿seré capaz de pasar esta megaaplicación en Cobol a algo más decente?".... Un concepto que estoy seguro de que habrá hecho derramar ríos de bits, pero en el cual no me había parado a pensar. Lo pongo en mi lista de cosas para mirar algún día.
Otro tema que surgió, y del que se habla en Qweos.net y en los comentarios a
su entrada, es el de "¿para qué debería servir un coctail?" y la falta de definición de temas y objetivos. Por mi parte, comparto la opinión de Jorge Correa de que se trata de un espacio informal, que no debería tener un guión previo, aunque también es cierto que ayudaría contar con otros medios (lista de correo, wiki...) donde poder comentar temas que luego se comenten cara a cara. Personalmente, lo que espero de estos cócteles es precisamente lo que estoy encontrando: un espacio informal en el que encontrarme con gente que trabaja en mis mismas cosas o en temas relacionados, conocer que hacen, que problemas tenemos, e idealmente, saber como lidian con esos problemas en su día a día... También es cierto, como apuntaba José Ramón, que esperamos que el organizador nos lo dé todo mascadito, y tampoco es eso. Entono un
mea culpa por la parte que me toca, y propósito de redención. Quizás sea también que aún no hemos llegado a la cifra crítica en la que el grupo se autoorganize...
En cuanto a temas más terrenales, sobre sitios de encuentro, me gustó mucho en el que acabamos, la terraza Alameda. Me parece ideal, si el ambiente habitual es el que nos encontramos. Aunque en La Barbería se come muy bien, y la camarera era lindísima ;) Estoy también por cambiar el día, personalmente prefiero los jueves, aunque la mayoría manda.
El mismo día, por cierto, se celebró en Tenerife el I Coctel de Usabilidad.
Lo cuentan en Barraquito.net.
Jorge Correa, al que he mentado, será el protagonista del próximo encuentro. Un canario trabajando en
The Cocktail, una de las empresas punteras a nivel nacional, al que esperamos sonsacarle cosas de su experiencia en la capital del Reino. Más info, en
Qweos.